La malaria sigue siendo una de las principales amenazas para la salud pública en África Subsahariana, responsable de 569.000 muertes en 2023, de las cuales el 76% corresponden a niños menores de cinco años, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En Camerún, la enfermedad es la primera causa de mortalidad, con una incidencia especialmente alta en mujeres y niños.