Burkina Faso, un país afectado por la violencia yihadista y una de las crisis humanitarias más olvidadas del planeta, enfrenta una alarmante situación con más de dos millones de desplazados desde 2015. Actualmente, casi la mitad del territorio del país no está controlado por el estado, lo que dificulta aún más la vida de sus ciudadanos.
En medio de esta crisis, La Fondation Recover ha logrado traer a España a dos mujeres con cardiopatías severas para recibir tratamiento médico. Este viaje no fue sencillo. Sin una embajada española en Burkina Faso, tuvieron que ser evacuadas para ir a Mali y recoger allí sus visados, gracias al apoyo de la diplomacia española. Además, a su llegada a España y a pesar de las gestiones de la fundación, no recibieron asistencia en el aeropuerto de Barajas, por lo que perdieron su primer tren hacia Albacete, donde se encuentran el Hospital Quirónsalud de Albacete en el que han sido operadas.
Gladys, de 29 años, sufría una insuficiencia severa en la válvula mitral y su diagnóstico era de uno o dos años de vida como máximo. Como vendedora, tuvo que dejar su trabajo debido a su enfermedad. Fue la primera en ser intervenida y su recuperación está siendo más lenta, aunque su evolución es muy favorable. Se le ha implantado una válvula biológica, cuyo mantenimiento es más económico, lo que le permitirá volver a trabajar y mejorar drásticamente su calidad de vida.
Victorine, de 19 años, está escolarizada y es la menor de seis hermanos. Vivía con válvula mitral reumática desde 2015 y no podía ni hacer deporte. Ahora, con una válvula mecánica cedida por Medtronic, su vida dará un giro radical. Su familia podrá costear el medicamento necesario para su mantenimiento, permitiéndole llevar una vida normal. Victorine vive en una aldea rural a una hora de Uagadugú, la capital, y es huérfana de padre.
En Albacete, voluntarios de Fundación Recover como Concha, Pepe o Alicia, acompañan a ambas pacientes y mantienen contacto con sus familias. Tras su hospitalización, estarán alojadas de forma gratuita en la Institución Benéfica Sagrado Corazón de Jesús de Albacete.
Las intervenciones, llevadas a cabo por el cirujano cardiovascular Gonzalo Aldámiz-Echevarría y su equipo, dentro del que se encuentra el Dr. Ramiro Montenegro, han sido un éxito. Marta Marañón, directora de Fundación Recover, y Cristina Rodrigo, responsable de voluntariado, viajaron a Albacete para estar con ellas y pudieron acompañar a Victorine en quirófano durante el transcurso de la operación. Si todo progresa bien, se espera que Gladys y Victorine regresen a Burkina Faso a finales de agosto. Allí se encontrarán con una vida mucho mejor de la que han dejado.